Los Cuatro Fantásticos núm. 33 de Dan Slott

Tras el paso de la primera familia de Marvel por “El rey de negro”, defendiendo junto al resto de héroes el planeta de Knull, nos llega una nueva grapa donde revisaremos el estado de los miembros del grupo tras todos los últimos hechos acontecidos en la colección. Haremos un viaje por el cuartel y por algún otro sitio que todavía no voy a desvelar pero donde veremos una vez más, que el miembro más importante del tándem creativo es el artista R.B Silva y por detrás un Dan Slott que sigue amoldándose a estos personajes.

La grapa comienza (Ojo, contiene spoilers, por si aún no has leído este número, sáltate esta parte) Reed y Ben están muy distanciados tras su pelea con un simbionte dominando a Ben. Para limar rencillas, Reed propone a Ben dar “un salto hacia lo desconocido para viajar a un lugar adónde nadie más ha ido” (toda una clara referencia a Star Trek) a través del Portal Eterno para acabar en una dimensión donde tendrán cualquier cosa que pidan. Mientras tanto, en nuestra dimensión tenemos un acercamiento entre Alicia y N´Kalla pues la madre está empeñada en adaptar a sus hijos adoptivos a la vida entre terrícolas.

A grandes rasgos, estamos ante un claro número de transición donde combinamos dos pilares fundamentales que siempre han estado muy presentes en la colección: la familia y la ciencia ficción, pues el viaje que realizan Mr. Fantástico y La Cosa son de los típicos que realizaba durante los 80 y 90 el supergrupo a la vez que toda la problemática familiar tiene mucha presencia pues tenemos al sector adolescente del grupo (Franklin, Valeria y cía) buscando su lugar en el mundo. Un número para disfrutar el lado “explorador dimensional” de los personajes y escenarios.

En calidad de lector de comics, creo que en este número al artista R.B.Silva le han dado carta blanca para dar rienda suelta a su imaginación pues el viaje por el portal eterno es un disfrute para el ojo del fan, donde vemos bocetos de sus principales villanos, maravillosos fondos y destaco un acting donde ha ido a mejor en cada número, destaca la tristeza que transmite Alicia cuando habla con N´kalla o el enfado de Sue cuando ve llegar a Reed de su “paseo”. Gracias a este dibujante Slott tiene siempre un as en la manga para sacar adelante la colección.

Un número que respira mucho aire clásico al tratar durante numerosas páginas el lado humano, pero al tratar la parte más joven del grupo puede descolocar al target más veterano. Aunque colocar a “los cabeza de grupo” en la parte de ciencia ficción es un dardo directo al corazón del fan, me lo he pasado genial por como se ha tratado la amistad entre personajes y la clásica rencilla que jamás olvida Ben hacía el que ha sido siempre su mejor amigo. Lectura entretenida sin muchas pretensiones.
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