Edición original: Dark Avengers/Uncanny X-Men: Utopia, Exodus, Uncanny X-Men 513 y 514, Dark Avengers 7 y 8 y Dark X-Men: The Confession
Fecha de salida: Diciembre de 2013
Guión: Matt Fraction
Dibujo: Marc Silvestri, Terry Dodson, Luke Ross y Mike Deodato Jr.
Formato: Tapa dura (Cartoné), 192 páginas
Precio: 18,95€
Vamos acercándonos al final de nuestro repaso de las novedades para diciembre de Panini Cómics para tratar el tomo “Marvel Deluxe. Patrulla-X Vs. Vengadores Oscuros: Utopía”, que viene a recoger el cross-over entre mutantes y Vengadores, o mejor dicho los Vengadores Oscuros de Norman Osborn, siendo un evento relevante dentro de Reinado Oscuro, la serie y trama protagonizada por el que fuera uno de los principales villanos de Spider-Man.
Precisamente esta historia es casi de las últimas que tendremos de Osborn en el poder, aunque antes de su fin toca ver cómo la “lía” con los asgardianos.
Este tomo recoge los números de las dos series que desarrollaron el cross-over, Uncanny X-Men y Dark Avengers (los anteriores números de esta segunda serie los tenemos en “Marvel Deluxe. Vengadores Oscuros 1: Reunión”), así como los números One-Shot que se publicaron accesoriamente para terminar de rematar el tema (sobre todo ese “Dark Avengers/Uncanny X-Men: Exodus One-Shot” que es la conclusión, sin él no se entiende nada de lo visto).
En un único tomo tenemos así recogido el principio y el final de esta historia, aunque se queda fuera esa lista de deseos que hace Norman Osborn en Dark Reign: The List o la miniserie de tres números Dark X-Men centrada en mostrar los motivos de los diferentes integrantes del grupo a decidir unirse.
Aprovechamos para decir que no estaría de más haber leído los antecedentes del escenario que aquí tenemos, desde los anteriores números de Vengadores Oscuros (recogido en el tomo Deluxe mencionado) para saber quiénes forman ese grupo, a la historia “Destino Manifiesto” de la Patrulla-X, para saber que ahora esta se ha trasladado a San Francisco. Detalles menores, y casi de los que se puede prescindir, pero que sirven para redondear la historia.
La historia de partida del cross-over es casi el mismo que el que tuvimos después del evento Vengadores vs. Patrulla-X, como es que la situación entre mutantes y humanos no es idónea. Simon Trask lidera así una marcha contra los mutantes al promover la Proposición X, con la que se busca impedir que los mutantes se puedan seguir reproduciendo. Cuando un reducido grupo mutante se enfrenta a esta multitud y acaban llegando a las manos, será cuando la situación se descontrole, y los poderes públicos deban pedirles responsabilidades a Cíclope como líder de la Patrulla-X. Una crispación que Norman Osborn intenta aprovechar para intentar presentarse una vez más como la solución a los problemas de la sociedad, y así conseguir ganar más poder (algo como lo que hace en Invasión Secreta).
Matt Fraction, responsable del reciente relanzamiento de Los Cuatro Fantásticos y que casi se encarga de hacer el evento Inhumano / Inhumanity, toma las riendas de todo el evento en las dos series, a excepción del último One-Shot.
El escritor ofrece aquí una perspectiva diferente a la que tenemos en sus recientes números de la familia fantástica, y hasta para mi gusto diría que estamos ante un cross-over algo caótico, no tanto por la narración, sino por determinados acontecimientos que no iremos entendiendo hasta el final. Fraction juega mucho con la intriga y el misterio, en alguna ocasión sin mucho acierto, pero en general consiguiendo mantener el ritmo. Estamos ante una historia de engaños, conspiraciones y con varios momentos de acción repartidos por la historia, aunque para mi gusto no consigue ofrecernos una batalla apoteósica.
Conviene no confundir este cross-over con esos macro-eventos que tenemos en Marvel, del tipo Civil War, Invasión Secreta o Infinito. Esto es más un evento a nivel de mutantes, que aborda ligeramente otros círculos, como sería el de los Vengadores Oscuros. De este modo, no se puede equiparar el cross-over a esos eventos, porque entonces nos acabará sabiendo a poco. La cosa es mucho más simple, para prácticamente haber únicamente tres bandos, los mutantes, los Vengadores Oscuros y la opinión pública liderada por Trask que se opone a los mutantes, y de este último poco se profundiza.
Aunque entretenido, no estamos para mi gusto ante uno de las mejores historias de Marvel, pero sus consecuencias tienen un impacto notable como casi siempre suele ocurrir. El principal defecto que le veo es el que le suele ocurrir a muchas de estas historias. Se le acaba dando una escala tal que a la larga determinadas perspectivas son vagamente exploradas, sin olvidar que determinados hechos son también fundamentados lejanamente. El desarrollo queda ligeramente también limitado porque Fraction se preocupa de hacer, aunque por encima, un repaso de la situación que se tiene antes de su historia, cuáles son los protagonistas de la historia (incluso se detiene a poner textos de apoyo identificando a los personajes en los primeros números, incluso algunos tan conocidos como Bestia y Cíclope). Al menos ese acto tan protocolario permite que casi cualquier lector se pueda meter en la lectura sin mucho conocimiento previo.
Al margen de este comentario personal, estamos sin duda ante un cross-over que todo fan Marvel debe leer. No sólo porque llevábamos 15 años sin tener cruce entre mutantes y Vengadores (sin que realmente lo que aquí tenemos sean los Vengadores propiamente dicho), sino por el entramado que ofrece Fraction en esta páginas, que además juega con diferentes estilos narrativos. Sin ser tampoco excesivamente elaborados, e incluso alguno queda de demasiado cliché, en el relato toman gran importancia los diálogos, las conversaciones que se mantienen y el doble sentido que en muchas ocasiones se le dan a las palabras.
Visualmente es otra delicia por la galería de artistas que al final acaban pasando por estas palabras. Así podemos gozar del estilo casi que diría más colorido y sencillo de Terry Dodson, a los toques más realistas de Marc Silvestri (ayudado dicho sea de paso por cuatro dibujantes) o Luke Ross, pasando por el maravilloso estilo de Mike Deodato, que prácticamente es un calco perfecto de la realidad. Una auténtica delicia para el ojo. En peor posición queda el trabajo de Bing Casino en el número de la Confesión, al final del todo, que es además el relato, escrito por Craig Klyle y Chris Yost, más ñoño de todos, al explorar la relación que hay entre Cíclope y Emma Frost.
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